Caramelito Carrizo anunció su boda con el padre de sus hijos: "Queremos celebrar el amor"

Cecilia Caramelito Carrizo, conocida por su vibrante participación en la televisión como animadora infantil, ha dado una noticia que ha llenado de emoción a sus seguidores. Después de 25 años de relación con Damián Giorgiutti, el padre de sus hijos, la carismática presentadora anunció que finalmente han decidido unir sus vidas en matrimonio.

Este anuncio ha generado mucho revuelo y alegría entre aquellos que han seguido su carrera y vida personal. La historia entre Cecilia y Damián es de largo aliento.

A lo largo de su relación, han enfrentado diversas pruebas que, de alguna manera, han fortalecido su amor. El viaje no ha estado exento de baches, incluida una separación que marcó el año 2023.

Durante esa difícil etapa, Caramelito enfrentó pérdidas y cuestionamientos personales, incluyendo el fallecimiento de su querido hermano Martín Carrizo. No obstante, su capacidad de sobreponerse a la adversidad es palpable ahora que anuncia su boda. Ella siempre ha mostrado una perspectiva positiva sobre la vida, un reflejo claro de su carácter perseverante.

 "Nos casamos el 7 de noviembre y estamos radiantes de felicidad", confesó Cecilia en una entrevista. Con la complicidad de sus seres amados, el evento ha sido planeado como una celebración íntima y significativa.

Caramelito y Damián han expresado que este momento no es solo una formalidad legal, sino una celebración del amor que han compartido y de la vida que han construido juntos junto a sus dos hijos, Lolo y Benito. La ceremonia de boda será una celebración sencilla pero emotiva. Desean mantener el foco en lo esencial: la conexión familiar y el amor verdadero. Esta perspectiva resuena profundamente en quienes siguen sus vidas desde hace tiempo.

El apoyo que la pareja ha recibido tras el anuncio revela la gran cantidad de personas que valoran y aprecian su unión. Un detalle encantador de este capítulo en sus vidas es la historia detrás del vestido de novia de Cecilia.

Inicialmente, planificaba usar un simple atuendo de lino, pero gracias a una intervención inesperada de su amigo y diseñador Mariano Toledo, fue posible que otro talentoso diseñador, Marcela Daff, creara un vestido de bodas especial para ella. Este significativo gesto se ha convertido en un simbolismo del destino, un regalo del universo como Cecilia misma lo describió.